Tan solo dos noticias dan cuenta de que el cainismo que nos condujo en 1936 al enfrentamiento a muerte entre hermanos no ha remitido.
Noticia nº 1.- La concejal socialista Carmen Alcibar García provoca que cientos de agentes y voluntarios se queden sin comida caliente porque quien la facilitaba era el eurodiputado Alvise Pérez y “De él no queremos nada”. Supongo que si la madre de esta hiena se estuviera ahogando y solo pudiera rescatarla Alvise preferiría dejarla morir antes que aceptar tal ayuda para ser coherente con su sectarismo.
La miserable que decidió por cientos de personas a las que ni siquiera consultó no miró lo esencial: que a una petición de ayuda respondió quien podía atenderla. En su mezquindad, si el auxilio no provenía de un conmilitón de su misma ideología no era digno de recibirse. ¿Qué clase de fanática puede anteponer sus anteojeras ideológicas al atender lo que la situación demanda? Este es el sectarismo rabioso que hace que no podamos superar los problemas de este país.
Si esta fascista que presume de antifascista no dimite o es cesada, poca esperanza queda de que podamos salir del lodazal al que la situación no ha arrojado (y, obviamente, no hablo solo de la DANA).
Noticia nº 2.- Las administraciones publicas han dado orden de incautar todos los medicamentos, comida, enseres … aportados por voluntarios que han antepuesto su buena voluntad a consideraciones ideológicas y políticas y entregarlos a ong de su cuerda o destruirlos. Tal cual, no vaya a ser que 450.000 personas afectadas dejen de consumir y gastar.
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Un país que ante la necesidad de los suyos no es capaz de dejar a un lado el fanatismo político no admite ya reforma o enmienda bienintencionada. O corrige su deriva totalitaria o estamos abocados a lo peor.
(posesodegerasa)
Conozco muy bien a este tipo de personas-basura porque por desgracia las tengo demasiado cerca.
ResponderEliminarY por favor, no tienen nada que ver con el fascismo...
Supongo que si hubiera redactado la entrada con mayor detenimiento hubiera escrito "totalitarismo" en vez de "fascismo", englobando así otras ideologías de control y sumisión al estado.
EliminarImagino que, inconscientemente, lo que dirigió mi elección del término es que, sin duda, sería el que más escocería a Alcíbar García, al verse sumida en lo que de seguro pretende distanciarse.
Todo lo que escueza a estos seres me parece bien.
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