Sin ánimo de ser agorero, los globalistas nos están montando una guerra en el Mediterráneo.
Sanchez recibió instrucciones de ofender deliberadamente a Argelia, aliada de Rusia, y aumentar el conflicto con Marruecos, aliado de Estados Unidos.
El NOM ya tiene planeados los beneficios de esta nueva guerra, entre otros cortar el suministro de gas desde el sur.
Sánchez es una criatura oscura que trabaja para sí mismo, no le importa nada España, ni su partido, y mucho menos el pueblo, la gente.
Entregará y hará cuanto le pidan los Bilderberg a cambio de asegurarse un futuro cuando deje de ser presidente del Reino. Nos venderá a los británicos, a los norteamericanos, a los marroquíes o a quien haga falta.
Si no sale pronto de La Moncloa, dejará España al pie de los caballos. Pero el NOM ya tiene preparado a su otro cachorro, Feijoo, para ocupar su lugar y seguir trabajando para ellos.
Mientras los electores sigamos entrando al juego de las falsas alternativas dirigido por Bill Gates y sus socios filantropófagos, seguiremos en el camino autofágico de la destrucción de Europa.
Nos la están liando parda a doce kilómetros de Cádiz, porque además de seguir con su plan de arruinarnos, pretenden robar las Islas Canarias, Ceuta, Melilla y Gibraltar con todas sus aguas ricas en metales raros, petróleo y fosfatos.
Entretanto Argelia deja claro que ya sabe qué teclas pul- sar para tocar las narices a un gobierno incapaz de de- fender sus fronteras. |
Suma y sigue: plandemia, Ucrania y ahora costa sur de Europa y norte de África.
¿Cómo lo sé? Como siempre, observando a las jirafas.
El movimiento de Sánchez con Marruecos, realizado por él solo, contra el que era nuestro suministrador de gas y que nos libraba de la carestía del norte fue tan deliberadamente negativo que solo una razón lo justifica, fueron órdenes precisas para desestabilizar la zona. No hay chantaje de su móvil, es otra excusa que explotarán como plan B si algo sale mal.
Sánchez quiere licenciarse con un gran último servicio a sus amos para garantizarse a sí mismo un buen puesto en la ONU o en cualquier otro organismo-premio de obedientes. Para conseguirlo no le temblará el pulso al entregar al Reino por un puñado de monedas.
Es un traidor ególatra muy peligroso que ya recibió las instrucciones de su jefe, Bill Gates, en su reciente visita: “esto es lo que vas a hacer”.
Marruecos quiere protagonismo y su sátrapa poder. Estados Unidos lo utiliza desde hace decenios para presionar a los dirigentes españoles desde que Don Juan Carlos era príncipe. Henry Kissinger sigue ahí, Cristina Martín Jiménez lo explica muy bien en varios de sus libros.
¿Qué podemos hacer?
No entrar al juego, ni en falsas vacunas ni en votar y apoyar a falsas alternativas políticas.
Nos están haciendo la cama por el sur.
Todos son títeres movidos por las mismas manos.
Fernando López-Mirones
(https://t.me/elaullido)
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