UNA ALIANZA NECESARIA

Todos los que estamos a este lado de la trinchera tenemos puntos de vista diferentes, planteamientos diversos, ideas dispares, todos arrastramos experiencias de vida personales e intransferibles que conforman nuestros caracteres y personalidades, todos los que estamos en esta lucha amamos nuestra individualidad y nuestra soberanía personal por encima de todo.

Por esa razón, plantear una gran alianza en la resistencia es innegablemente complicado, más no por ello imposible, pues tenemos objetivos demasiado importantes, y nos necesitamos para la consecución de los mismos.

Si nos organizamos tendremos más fuerza, más capacidad de respuesta y la posibilidad de avanzar más rápido, pero previamente es necesario firmar un pacto de no agresión, un acuerdo de mínimos, empezando por los principales referentes de comunicación alternativa y contra opinión.

Un pacto en el que se determine respetar las lineas de investigación y las propuestas de unos y de otros, aun sin compartirlas o estar de acuerdo en todo, y donde quede garantizado que los problemas personales se resolverán dentro del ámbito de la estricta privacidad.

Un pacto en el que se dejen a un lado las envidias, los rencores, los egos, las amenazas, y toda la ponzoña acumulada durante los últimos tres años para crear un frente común y golpear a nuestro enemigo donde más le duele.

No es necesario que nos abracemos, ni que pensemos igual, ni siquiera que nos caigamos especialmente bien, solo hay que tener claro, cual es nuestro enemigo, y que nunca vamos a consentir que nos esclavicen de por vida, pisoteando nuestros derechos y nuestros valores.

Crear una economía sostenible al margen del sistema que nos permita acceder a productos y servicios de primera necesidad es posible, plantear una alternativa social, fuera de la estafa institucional es posible, solo hay que tenerlo claro y empezar a organizarse, el momento es ahora, cada uno elige, cada cual decide, pero esa decisión llevará implícita la semilla de aquello que queremos construir realmente. Por ello merece la pena reflexionar y hacerse esta pregunta ¿estamos dispuestos a dejar a un lado nuestras diferencias para crear una alternativa y salir de la cárcel en que nos encontramos? ¿o dejaremos que destruyan todo aquello que nos define como seres humanos libres y soberanos?

¡¡Feliz semana a todos los valientes, anti globalistas, desobedientes del planeta, energía y Rock and Roll, la cabeza alta y la cara descubierta siempre!!!

Mártin Sánchez