¿MEDIOS DE COMUNICACIÓN ... O MEDIOS DE PROPAGANDA?

Tal y como informó consortiumnews.com (y muy pocos medios más) los cilindros presuntamente cargados de gas venenoso que supuestamente mataron a docenas de personas en Douma, y que los falsimedia de la OTAN dijeron que fueron arrojados desde el aire por el ejército sirio, fueron colocados manualmente por personas 'en tierra', donde luego se tomaron y circularon fotografías en todo el mundo como evidencia contra el gobierno sirio.

Tal "evidencia" fue utilizada para justificar ataques aéreos de Estados Unidos, el Reino Unido y Francia.

Solo que la verdad suele acabar por salir a la luz, y esta semana hemos sabido de un informe que demuestra la falsedad de la excusa a la que acudieron Trump y sus secuaces, quienes dieron por válidos los reportes de los "Cascos blancos" sin confirmar por ningún otro medio la acusación contra Assad y procedieron a aportar con su lanzamiento de misiles un balón de oxígeno al ISIS y otros "islamistas moderados", por entonces puestos contra las cuerdas por el Syrian Arab Army (SAA), el ejército nacional sirio.

Las fuerzas terroristas del yihadismo internacional financiado por las petromonarquías del Golfo contaron con todo el crédito de los medios al informar de un ataque imaginario contra un objetivo no estratégico, y que era mas fácil atacar con armas convencionales, justo cuando la guerra ya se estaba decantando a favor de Assad.

Y aquí surge la pregunta del millón: ¿qué medios occidentales llegaron al menos a dudar de una narrativa tan forzada?

Los medios alternativos denunciamos el fraude, un clásico ya de las excusas "humanitarias" calificado como "fake bombing". El único medio televisivo que en España habló de montaje fue un programa presuntamente friki y conspiranoico como "Cuarto Milenio". El resto de los grandes medios desplegaron su habitual panoplia de recursos al servicio de las mentiras del poder. ¿Quiénes cumplen con ser "medios de información, y quiénes de mera propaganda?

En Sky News se llegó a la indignidad de retirarle la palabra en directo a un analista cuando puso en duda la versión gubernamental del ataque:



Y, como siempre, los titulares rectificando la patraña que se vendió a los ansiosos por comprarla se están haciendo esperar.

(posesodegerasa)