Que una catástrofe de la magnitud de la que nos tiene el corazón en un puño se haya abatido sobre una región tan vinculada a la música como Valencia hacía poco menos que inevitable que el desgarro producido, la solidaridad y la voluntad de ayuda econtrasen su vía de expresión en canciones como las que traigo hoy al blog.
La primera de ellas me ha sorprendido poderosamente, pues es obra de Marcel García, un youtuber del que alguna vez he enlazado reflexiones que son de un demoledor sentido común, pero cuya faceta como cantautor desconocía. Y la verdad es que no lo hace nada mal:
En segundo lugar, tenemos este himno "de circunstancias" que han creado tres jóvenes valencianos -Marta Ali, Aleix Martel y Poly Mathal- y que pone la piel de gallina:
El inquieto Aldo Narejos, a quien desde aquí mando el más efusivo abrazo, ha compuesto junto a Sean Marholm un tema que agradece la labor de los voluntarios:
Melendi no es santo de mi devoción, pero que haya puesto su granito de arena compartiendo unos versos que son como el esbozo de una canción futura es un bonito gesto:
Finalmente, la inmediatez y verbosidad del rap se muestran como un vehículo idóneo para lanzar el poderoso alegato con que Pepe Carballo echa en cara a los políticos el abandono en que han dejado a los afectados:
@pepe.carballo8 ♬ sonido original - rap_revolution
Cada vez me sucede con más frecuencia que cuando me pongo a hablar con gente de la calla a la que no conozco descubro que piensan lo mismo que yo en lo que respecta a la pandemia -no se vacunaron-, el cambio climático -no se lo creen-, la demonización de Trump -están contentos de que haya ganado-, el discurso feminista y transgénero -están hasta los cojones-.
ResponderEliminarLos medios de propaganda de masas nos hacen creer que a los que pensamos así somos cuatro locos, y lo cierto es que no es así... y parece que cada, a pesar de todos sus esfuerzos, cada vez somos más.
Afortunadamente parece que desperdiciaron la oportunidad de exterminar a la humanidad en el 2021... -no sé que mierda pincharon a la gente, pero parece que la mayoría de los que se lo pusieron han sobrevivido, algunos jodidos de salud y quizás estériles, pero, en cualquier caso vivos-.